El sector de los eventos, tal y como hoy lo conocemos , nace en España, en el año 92. Se trató de un año capital para la evolución del sector, tal y como explica Torrents: “La aparición en escena de los tres grandes acontecimientos que marcan el año 1992 en España (Exposición Universal de Sevilla, Juegos Olímpicos de Barcelona y Madrid Capital Europea de la Cultura) suponen el trampolín definitivo para este sector que, de la noche a la mañana, ve como sus operadores se multiplican ante la gran demanda de los tres grandes acontectrTRimientos”.
Antes de estos tres hitos, los profesionales que trabajaban en este sector procedían de sectores diversos y poseían una formación heterogénea aunque complementaria. Algunos provenían del mundo del espectáculo, otros venían desde la publicidad y el marketing y los otros llegaron desde servicios adicionales a los eventos (medios audiovisuales, azafatas, etc.).
Con el paso de los años se fueron profesionalizando, y empezaron a ofrecer servicios integrales de organización de eventos. Este origen multidisciplinar de los profesionales de los eventos y la necesidad de recurrir a un intenso trabajo en equipo, supuso para el sector un alto nivel de especialización y aprendizaje.